viernes, 7 de septiembre de 2007

Como un baile de mascaras, el día.

Ninguno llega tarde... El que vino después trae consigo la escusa. Y el primero exhibe con la frente en alto la voluntad, cual medalla de ego reluciente en homenaje al "honor".
El mísero oculta sus penas en vano y el bello se gasta en autoenamorarse.
La princesa es blanco fácil de miradas envidiosas que derrumban como la guerra y ofenden como al macilento su cobardía.
Las copas emborrachan de Argentina a los que festejan sus sinsabores y muy salado está el copetín del que se queja el cuerpo de aquella mujer. ¿De virtudes? Eso lo busca aquel con grandilocuencia resolviendo acertijos absurdos de palabrerío barato.
El violinista sigue a la orquesta, y esta al que sepa las partituras. Pero el que las recita sigue al más intuitivo, a su vez perdido, en su propia encrucijada.
El poeta vuela lejos del salón, acompañado de la bailarina, su musa y más melodía.
Y el bals comienza, ¿como todos los días? ...

6 comentarios:

Ezequiel dijo...

Mi mascara a veces no me permite mirar mas alla, creo que tendria que quemarla..

Tu mascara como es?

Brian dijo...

jaja eee yo no se... jaj puede ser, si. tenemos mascaras diferentes todos los dias pero las mascaras se van la vida que es solamente esperar a que llegue la muerte para que esas mascaras se vayan. es mas. no se si esas mascaras siguen cuando estas muerto... no se igual la re flashe puffff

m. dijo...

es tan mediocre que sea tan com�n nuestro baila de m�scaras de d�a.
me encant� el texto anterior nashh
que andes bi�n ;)

Desnudando el alma dijo...

Es increíble que a tu edad ya descubras tantas verdades de la vida.
Te felicito Nash!!!

Anónimo dijo...

nashhh soy marti =)
tengo tu telefono en el historial de msj de mi compu y no la puedo usar:s ajaj
espero que no sigas enferma!.
adi{os

Pía dijo...

el futuro ya llegó